Trabajamos toda una vida con sacrificios y esfuerzos para llevar el sustento a nuestras casas, para poner un plato de comida en nuestras mesas, para hacer estudiar a nuestros hijos ya que nadie nos regalaba nada, porque no había subsidios, planes o alguna ayuda del gobierno, todo lo hacíamos a pulmón trabajando, aportando para nuestro futuro y pagando los impuestos, poniendo nuestro pequeño granito de arena para hacer grande a éste bendito País.

Señores sepan que nosotros, ésta generación que está pasando y llegando a su fin tuvimos el privilegio de construir y comenzar a vivir en un País que lo empezaba, gracias al empeño de toda su gente al desarrollo, bienestar, crecimiento, porque estaba basado en el respeto de todos sus habitantes, en la cultura del trabajo y esfuerzo, no solo para su crecimiento personal sino también para la grandeza del País.

Pero vemos con gran dolor que todo ese esfuerzo que hicimos nosotros, que tuvo que luchar para volver a restablecer la democracia, ya que vivíamos en una dictadura cruel y sangrienta, que costó la vida a muchos de nuestros compatriotas, que lucharon para vivir en un País y en total libertad, es hoy tirada por la borda por una casta política que nunca conoció y vivió estos momentos difíciles que nosotros tuvimos que soportar, ya que nos vuelven a meter en una injusticia que tenemos que volver a soportar, por sus actitudes bochornosas de ineptitud y corrupción, que nos lleva al pueblo, pero no a ellos, a una pobreza e indigencia más cruel todavía.

Despilfarran todo lo echo y logrado poco o mucho, para sus arcas y ambiciones personales, haciéndose dueños de algo que no les pertenece, ya que el mismo es el logro del esfuerzo de la gente que trabaja de sol a sol para lograrlo, ¿pero que van a saber ustedes clase política de esto si siempre vivieron a costillas del Estado?, con mínimo esfuerzo, pero si, dándose la vida ostentosa que todos ustedes viven, sin importarles las carencias y  dificultades que está soportando el pueblo argentino.

Y que podemos decir nosotros, los jubilados que la sentimos a flor de piel viviendo y soportando la injusticia que se comete con nosotros, con jubilaciones paupérrimas de sueldos miserables que no llegan a cubrir, ni la tercera parte de la canasta básica, que apenas alcanza para vivir 15 días del mes.

Cuando se reúnen ustedes señores políticos en las cámaras de diputados o senadores para discutir un reajuste de la movilidad jubilatoria, sentimos que ese día se reúnen para jodernos, que no les importa nada aunque hayamos trabajado y aportado más de 35, 40 o 45 años, y que la mayoría cobramos la mínima, porque la política es la primera en echarle mano, cuando ven una caja donde hay plata.

Hacen debates echándose la culpa unos a otros, pero solo es una comedia brillante, donde utilizan como escenario el recinto, haciendo actos como si fuera una obra teatral, debería darles si les queda un poco de dignidad, vergüenza por sus actitudes que están siendo vista por toda la población y el mundo entero, dejando una imagen negativa y bochornosa de su accionar político.

Por eso es que les pido a todos los que vienen detrás nuestro, que tomen como lo hicimos nosotros, con agallas y coraje las riendas necesarias para cambiar los destinos de la situación que estamos viviendo, con las herramientas  que legalmente tenemos y que es a través del voto y que cuando estemos en el cuarto oscuro, no votemos con el corazón ni partidismo, hagámoslo con la cabeza y memoria, recordando a todos aquellos que con su gestión o participación política le hicieron daño al pueblo argentino, entonces ahí sí, les haremos sentir la justicia que se merecen.

Escrito por Jorge Dimuro para El Pucará

“La Voz del Jubilado”

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