Por Leandro Peres Lerea (*)

Hace 25 años que alrededor de esta fecha las autoridades nacionales, sean del signo político que sean, producen importantes dosis de fake news sobre el atentado a la sede de la AMIA, pero hasta la fecha solo tenemos la única certeza de que a las 9.53 hs del 18 de julio de 1994 una Traffic dejó 85 muertos y más de 300 heridos.

Durante estos 25 años se iniciaron más de 70 causas y se dieron 500 incidentes judiciales, 250.000 fojas, se conformaron unidades especiales de investigación y se crearon fiscalías especiales para tratar la causa, pero solo conseguimos vergüenza y desazón.

En estos 25 años sucedieron y suceden alrededor de la causa innumerables situaciones y papelones que dejan al descubierto un Estado y un sistema judicial algo tartamudo y bastante ineficiente, cuando no complice por omisión. Hoy, en plena campaña electoral, surgen, desde algunos candidatos, infértiles comentarios sobre el memorándum que solo consiguen ofender la memoria de la víctimas.

En este cuarto de siglo, palabras como conexión local, UFI Amia, Memorándum, alertas rojas, pista siria, pista iraní, comisión de la verdad, traición a la patria, Nisman y otras tantas conforman una intensa nube de palabras que remiten a la causa y solo llevan a agrandar la falta de justicia.

El famoso versículo bíblico con el que ironizo el título de esta nota dice: ”Justicia, justicia perseguirás”. Es y ha sido citado infinidad de veces en lo referente a la busqueda de justicia.

La Biblia nos dice perseguirás y no alcanzarás para enseñarnos que la busqueda de justicia debiera ser un objetivo móvil y constante. “ Perseguirás” está traducido de la palabra hebrea tirdof  y refiere a la búsqueda constante de perfeccionar la justicia y la forma de comportarnos como sociedad, puesto que, una vez que la sociedad se perfecciona, los estándares de justicia deben ser más refinados.

La justicia es simbolizada habitualmente con una venda en los ojos para no favorecer a uno por sobre el otro. La Torá dice que el soborno enceguece la justicia. La búsqueda de justicia y valores éticos es algo que la sociedad debe perseguir y nunca quedar satisfecha.

Memoría, verdad y “que sea justicia”.

(*) El autor es vocal de la Comisión Directiva de la DAIA.