Por Mordaz (h)

Hace unos días, los principales medios periodísticos de la provincia recibían en sus redacciones una noticia que quizás haya pasado desapercibida para muchos de ellos, no así para éste medio, pues la consideramos una cuestión central en la vida política de la provincia. La noticia trataba de un comunicado de la Juventud Universitaria Peronista de Catamarca.

En efecto, decíamos que nos habíamos detenido especialmente en ésta noticia, justamente porque se trata del tesoro de los pueblos: La Juventud, que en este caso se autodenomina “Universitaria” y “Peronista”.

Pero antes vayamos al grano. Allí se indicaba con bombos y platillos que los representantes de las agrupaciones universitarias se reunían con la finalidad de elegir nuevas autoridades. Se redactó un acta de forma como se hace siempre, hablan de democracia, distribuyen cargos y luego salen a buscar el poder, la auténtica vocación de todo peronista, sea veterano o joven.

Pero ese no es el punto sino el nombre que tiene la agrupación que su título reza igual que la JUP de la década del 70, brazo armado de la Triple A de López Rega que junto con la Concentración Universitaria y la Juventud Peronista Sindical, salieron a matar socialistas y compañeros “izquierdistas” en la ciudad de Mar del Plata, donde en un solo año cometieron más de 1400 crímenes, la mayoría de los cuales permanece impune.

Así las fechorías criminales de la Juventud Universitaria Peronista tiñeron de la peor sangre que existe, la sangre de la violencia política y de la intolerancia. La aberración criminal impune, se perpetró en un gobierno constitucional peronista y gracias a que todavía quedan algunos jueces probos, esos delitos cometidos en un gobierno supuestamente democrático fueron declarados crímenes de lesa humanidad y en consecuencia, imprescriptibles.

La última frase del parte de prensa decía textual “Los jóvenes estudiantes intercambiaron ideas para plasmar los principios justicialistas a todos los claustros universitarios, adhiriendo al proyecto que lleva adelante la líder partidaria Lucía Corpacci.”

¿Conocerán su propia historia los jóvenes universitarios peronistas catamarqueños? ¿Sabrán que en nombre de la agrupación que lleva el mismo nombre se cometieron crímenes de lesa humanidad?

Bueno, quizás con esta reflexión se enteren que existe un pasado manchado de sangre de inocentes que dieron su vida sin saber porque.

En memoria de los mártires de la sinrazón de la violencia política, como periodista, elevo la voz de los que no tienen voz y pido una oración por los compañeros asesinados en Mar del Plata durante el año 1975.