Alternativa Federal quedó desilachada, con un conjunto de choques de egos y malos cálculos de los protagonistas. Cristina los hirió de muerte ubicándose abajo de Alberto para derruir ese espacio y facilitar la unidad de los gobernadores peronistas a su proyecto.

La huida de Massa, hacia el bloque opositor rancio, y las vacaciones que se tomó Schiaretti, hicieron el resto.

Lavagna es un residual del armado y ya estaría midiendo en la escena de un digito, a pesar de Duhalde y Barrionuevo que sigen esgrimiendo un discurso demodé.

La nueva situación promueve una nueva estrategia al gobierno nacional. El presidente que dijo, en la intimidad, que “antes se cortaría un brazo , si tenía que compartir una fórmula con un radical”, ahora lo evalúa seriamente,

El cara o seca, de la política, fue retro alimentado por los estrategas de la Rosada, que siempre vieron en la confrontación a Cristina su única oportunidad de ganar, a raíz de los fracasos económicos.

Ahora esa opción consolidada les provoca angustia electoral. El presidente los trata de calmar y dice que en segunda vuelta ganan. El clima derrotista a veces les gana a los evangelizadores de la campaña.

El vice, o seguramente “la vice”, se ha transformado en una pieza clave. El casting se perfila más por el puchero de votos a conseguir pero sobre todo pensando en el día después, para gobernar un país agrietado y endeudado hasta los tuétanos.

La adherencia de Massa a Cristina no es uno más uno igual a dos. Su capital político se fue devaluado y de hecho las segundas y terceras líneas del FR se les fueron antes de que mueva. Igual tiene un efecto fuerte hacia la simbología del peronismo, que encuentra la chance concreta del retorno, hace un año inimaginable.

Una jugada audaz e inteligente de Macri en la apertura de la fórmula le podría acercar dos. o tres puntos para dar pelea y mantenerse competitivo.

Los oficialismos provinciales siguen haciendo triunfos, en la previa de la gran final , aumentando el desconcierto de hacia dónde irán los votos indecisos cuando la moneda este en el aire. Sin embargo, Santa Fé puede marcar la diferencia con Omar Perotti, ya alineado a Cristina, se acerca en las posibilidades de destronar al socialismo, carente de un proyecto nacional ante la muerte de la tercera vía.

La culebrilla en estado avanzado carcome el cerebro y el corazón. Un médico que asuma su sacrificio a cambio de quedar en la historia como pacificador, tiene poco margen de acción en una sociedad con la peste encima.

Expediente Político.