Stefanos Tsitsipas es un nombre que va a quedar en la historia de Grecia. Un país con espíritu olímpico (albergó los primeros Juegos de 1896), pero con una variedad de sucesos deportivos que permitieron escribir un cuento de películas (la Eurocopa de 2004, por ejemplo). En ese sentido, el tenista de 22 años se convirtió en el primer jugador de su nación en alcanzar una final en un torneo de Grand Slam luego de haber derrotado a Alexander Zverev por 6-3, 6-3, 4-6, 4-6 y 6-3 en una verdadera batalla.

- Las sensaciones de haber perdido una ventaja de 2-0 en sets y después poder cerrado

Intenté tener una buena relación conmigo mismo. Y, a partir de eso, poder animarme y empujarme hacia adelante para buscar algo bueno. Sabía que no había terminado el partido en ese momento y que aún tenía algo más para dar. Empecé a jugar mejor y entonces lo único que debía hacer era concentrarme en lograr mi objetivo.

- ¿Es la mejor victoria de su carrera?

Realmente significa mucho haber podido ganar porque fue un partido muy difícil y lleno de emociones en la que ambos pasamos por muchas cosas. Y al final cuando gané pude sentir una sensación de alivio muy importante. De todos modos fue agotador, pero estoy orgulloso de mi mismo. Amo lo que hago, me encanta jugar en este estadio y estoy agradecido por cada partido que puedo jugar. Es algo que siempre he soñado y que deseaba que sucediera algún día.

- Las lágrimas después del triunfo en la entrevista a pie de pista

Roland Garros es un torneo histórico y que lo he seguido desde que era pequeño. Además, es el torneo favorito de mi entrenador, yo crecí con él y siempre lo mirábamos. En ese sentido, estaba también un poco emocionado por él, quien está en Grecia ahora mismo. Estoy seguro de que está orgulloso de mí. Pero este fue recién el primer paso porque mi tarea aquí no ha finalizado.

- La percepción sobre la final

Más allá del rival, el partido será muy físico y deberé estar concentrado y con mucha atención a todos los detalles. El compromiso tendrá que ser el mismo, así como también el nivel de tenis y al intensidad. Si fuera con Rafa me gustaría pensar que no hay grandes diferencias entre estas pistas y las de Barcelona. Es muy respetado, lo ha hecho muy bien aquí, pero es hora de que apueste por mis oportunidades y de que demuestre que soy capaz de vencerlos. Así que espero con ansias ese desafío.