Con ese panorama, Leonardo Burgos, emitió y formó un comunicado donde la central obrera respalda a el mismo en su enfrentamiento con APROSCA ante los reclamos del sector Salud.

En el texto se advertía el duro cuestionamiento a los auto-convocados y estaba dirigido a “aquellos que promueven medidas de fuerza ilegales atribuyéndose una representación gremial inexistente”.

Sin embargo, al conocerse el documento generó una división en la central obrera. Gladys Moro, secretaria general de la CGT, y referente de APUNCA, negó haber sido convocada para redactar este apoyo, a quien acusó de creer que la CGT es de su propiedad.

Aunque no fue unánime, el respaldo al titular de ATSA, significó la primera vez que la conducción provincial de la CGT se involucraba en el conflicto con los trabajadores de Salud y pidió al Gobierno que las conversaciones y negociaciones se hicieran “con las entidades gremiales”.

El comunicado, que está firmado por el Consejo Directivo “con el aval de la mayoría de los gremios”, rechazó lo que consideró una “actitud irresponsable” de los sectores que hoy mantienen el reclamo en Salud y otros organismos del Estado.

Sin consulta

Pero Gladys Moro, aclaró que el sector que conduce en la central obrera no comparte el documento que se firmó en respaldo a ATSA y Leonardo Burgos en su pelea contra APROSCA y los auto-convocados.

“Con ese comunicado avasalla nuestras funciones ni nos respeta como dirigentes sindicales. Parece que Burgos se cree el dueño de la CGT”, manifestó luego de conocerse el comunicado, donde ratificó que no fue convocada para firmar esa declaración.

“Nuestra Agrupación (Azul y Blanco) y yo como secretaria general de la CGT no hemos sido convocados a ningún plenario desde que asumimos, ni hemos participado en la redacción de ese documento y no compartimos con el texto del mismo”, dijo Moro.