Los abusos  sucedieron desde que ella era chiquita hasta hace unos años atrás, cuando dejó de concurrir a la casa de un familiar a la que iban también los agresores. Siempre según los dichos de  la adolescente, sus primos, todos mayores de edad, comenzaron a abusar de ella cuando su madre la llevaba de paseo a la casa de su abuela o bien la dejaba allí para que la cuidaran.

Primero fue uno de los primos, que empezó a tocarla en sus partes íntimas pero después se sumaron los otros dos, quienes, además, la amenazaban para que no le dijera nada a nadie, bajo amenazas de hacerle daño, le contó la víctima a su  madre. Además, le habría dicho que sus primos no la habrían accedido carnalmente  pero que sí la obligaron a que les practicara sexo oral.

Tras escuchar el desgarrador relato de la madre, los investigadores informaron del contenido  a la fiscalía en turno, quien dispuso que la chica sea sometida entre otras pericias al protocolo de abuso. Si bien en la denuncia la madre de la víctima brindó las identidades de los supuestos autores, hasta el momento no se tomaron medidas contra su  libertad personal.