El proyecto del Diputado Hugo Ávila fue redactado de la siguiente manera:
LA CAMARA DE DIPUTADOS DE LA PROVINCIA DE CATAMARCA:
RESUELVE
ARTICULO 1º.- Dirigirse al Poder Ejecutivo Provincial para que a través del Ministerio de Minería de la Provincia se informe a este Cuerpo cuales fueron los motivos por los cuales no se realizó la inversión del acuerdo suscripto entre la provincia y la empresa Minera del Altiplano SA (Livent), por la cual se dotaría de gas natural a la Villa de Antofagasta de la Sierra.
ARTICULO 2º.- De Forma.
En la exposición de motivos del proyecto, el legislador provincial, fundador del Frente Amplio Catamarqueño, expresó los fundamentos jurídicos y facticos de su labor parlamentaria vinculada con la cuestión minera y el destino de los fondos que oportunamente anunció (y no cumplió) la ex gobernadora Lucía Benigna Corpacci. A continuación transcribimos el texto de manera literal:
"FUNDAMENTOS
Sra. Presidente:
En el marco de un convenio suscripto a principios de octubre del año 2013, la ex Gobernadora Lucia Corpacci, anunciaba la instalación de una planta de gas natural virtual en Antofagasta de la Sierra.
En el promisorio acto llevado a cabo en esa localidad Lucia Corpacci, entre otras cosas, decía textualmente: “…una vez que este funcionamiento esta planta de gas natural virtual los antofagasteños ya no van a tener que andar peregrinando en busca de leña o penando por una garrafa…”, lo cual fue otra de las tantas mentiras de la hoy candidata a Senadora Nacional.
Sin embargo, se sabe que, mediante ese convenio, la empresa Minera del Altiplano (actual Livent) donó a la provincia 500 mil USD y los costosísimos equipos de gas virtual que venía utilizando hasta que concreto la obra del gasoducto.
Es decir. La provincia que gestiono la obra del gasoducto de MDA recibió como contraprestación contractual equipos y dinero para la realización del conectado domiciliario de gas natural, pero la obra nunca se concretó, lo que me lleva a preguntar: ¿Qué paso con eso bienes y ese crédito? ¿Se Los quedo Lucia Corpacci o Ángel Mercado?
Sra. Presidente: es palmario el saqueo de nuestra minería por parte de la gestión Corpacci en beneficio de esa empresa y es evidente el “entuerto” con la ex Gobernadora ya que hoy Livent se ve beneficiada con 200 millones de pesos extras para culminar obras del Fondo Fiduciario “Salar del Hombre Muerto”, que ella misma debía aportar al fideicomiso.
También es evidente que Lucia Corpacci, quienes para muchos es la gran precursora de las políticas mineras de Catamarca, no es más que una simple “apropiadora” de nuestros recursos naturales y quedara en la historia como la peor Gobernadora que tuvo nuestra provincia, por haber dilapidado todo nuestro capital en beneficio de las grandes corporaciones.
Los hechos no me dejan mentir. Mientras estamos parados sobre una riqueza mineral somos la segunda provincia más pobre del país, la con mayor desempleo del NOA, con el peor sistema sanitario público y la menos alfabetizada. Es decir, carecemos de producción, empleo, salud y educación, ósea, de los pilares básicos para proyectarnos y salir de esta crisis, pero aun así nos damos el lujo de financiar a la segunda productora de litio más grande del mundo con 200 millones de pesos.
Me resulta increíble que los catamarqueños sigamos “bancando” este despojo y las mentiras de Lucia Corpacci. Hoy veo una campaña política donde se habla de progreso, cuando saquearon la minería. Una campaña donde se habla de logros, cuando le mintieron al olvidado pueblo de Antofagasta que tendrían gas en 18 meses desde octubre de 2013, por eso les pido a todos los catamarqueños que tengamos memoria y no nos olvidemos quienes fueron los que iniciaron el camino de la mayor crisis provincial.
También quiero pedirles a mis pares que, en honor a la preservación de nuestros recursos naturales, me acompañen con su voto en esta iniciativa y a los fines de que recabar esta información con el objeto de iniciar las correspondientes acciones judiciales en contra de Lucia Corpacci y sus “secuaces”, todos responsables del robo explicito que sufrimos los catamarqueños durante ocho años.
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