En Avantripero, blog de noticias de la agencia de viajes Avantrip, existen por lo menos 5 lugares imperdibles para visitar y así "conocer" Catamarca. Las visitas que sugieren son las siguientes:
Dunas de Tatón
Enormes montañas de arena que se ubican al oeste de la provincia, en el departamento de Tinogasta y ocupan un área de 103 km2. También llamados “glaciares de arena”, entre ellos está la duna Federico Kirbus, la más alta del mundo, que mide 1.230 metros. Su base está a 1.615 metros sobre el nivel de mar y su cima a 2.845 metros. Es casi 30% más elevada que la que le sigue, la “Duna Grande”, que se alza en Ica, Perú.
Las Dunas de Tatón son ideales para los amantes del sandboard o para aquellos que adoran travesías en 4×4. También cautivan la mirada de fotógrafos y turistas que disfrutan de exóticos paisajes. Además, estas murallas de médanos son también uno de los lugares elegidos en los circuitos del Dakar para sus competencias.
Pueden visitarse durante todo el año, si bien en verano es recomendable ir bien temprano a la mañana o hacia el atardecer porque hace mucho calor.
San Fernando del Valle de Catamarca
La capital de la provincia es uno de los lugares de Catamarca que hay que visitar. Siguiendo su nombre, está ubicada en un valle a orillas del río del Valle, rodeado de sierras, entre ellas la de Ambato y la Sierra de Ancasti. Para apreciar su visual postal, es recomendable que visites la Cuesta del Portezuelo.
Los principales atractivos de la ciudad son su arquitectura colonial, su vida cultural (de hecho hay un mercado de artesanías y varios museos: arqueológico, folklórico y hasta de deportes), sus comidas típicas como los lomitos y sus vinos, y su música, como el folklore.
Además, se trata de un centro religioso católico destacado por su peregrinación a la Virgen del Valle. Visitas de culto aseguradas son: la Iglesia de San Francisco y la Catedral Basílica.
Por último, tener en cuenta que la capital de Catamarca sirve también como puerta de entrada para muchos puntos turísticos, como los diques El Jumeal y Las Pirquitas, que se pueden visitar en el día.
La Ruta de los Seismiles
Se trata de una ruta turística de casi 200 kilómetros, que une a la ciudad de Fiambalá con el paso San Francisco, en la frontera con Chile. Recorrerla significa conocer las entrañas de la Cordillera de los Andes, contemplando un paisaje desértico y 19 volcanes de más de 6 mil metros de altura (de ahí el nombre Seismiles), como el Inca Huasi, el Pissis, el Galán y el Ojo del Salado (este último es el más alto del mundo, con 6.893 metros).
Las cumbres se convirtieron en grandes desafíos para los turistas montañistas y son ideales para los amantes de los deportes extremos. Las culturas andinas originarias reconocían a los Seismiles como morada de dioses y seres sobrenaturales, y realizaban ahí peregrinaciones y ceremonias.
Ideal es que los paseos por la Ruta de los Sesimiles se realicen entre los meses de octubre y abril, por cuestiones climáticas.
Campo de Piedra Pómez
El campo de Piedra Pómez es un Área Natural Protegida que queda al sur del departamento Antofagasta de la Sierra, ubicado a más de 3 mil metros de altura sobre el nivel del mar, y tiene una extensión de 25 kilómetros.
La actividad volcánica (hay más de 200 volcanes en la zona) y los fuertes vientos gestaron, con los años, unas formaciones extrañas de roca color blanco, amarillo y ocre con puntas rosadas: algunas de ellas superan los 4 metros de altura. Amantes de la fotografía y el turismo aventura definen al paisaje como un verdadero "paisaje lunar", porque sus postales parecieran "picos de merengue" que contrastan en días claros, con cielos límpidos y azules.
Las excursiones parten desde la localidad de El Peñón. El campo de Piedra Pómez también se puede recorrer caminando, pero es importante hacerlo con mucha agua, gorros y protección solar.
La Ruta del Adobe
Se trata de un recorrido de 50 kilómetros a lo largo de la Ruta Nacional 60 que va desde Tinogasta hasta la entrada de Fiambalá.
Se llama Ruta del Adobe porque casi todos sus principales edificios y muchas de sus viviendas familiares están construidas con adobe, una mezcla de barro y paja. Son estructuras sólidas para resistir al clima de la zona.
El circuito se inicia en Cerro Negro. Hay construcciones destacadas, como la Iglesia Nuestra Señora de Andacollo (ver foto correspondiente al subtítulo) en el paraje de La Falda; la antigua estación del FFCC Belgrano en la localidad de Copacabana; el Oratorio de los Orquera, una pequeña capilla familiar del año 1747, en El Puesto; la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario, que data de 1712; el Mayorazgo de Anillaco de 1714, una construcción española de estilo andaluz; la Casagrande, un hotel de Adobe de 1897, y el Centro Cultural de Tinogasta.
La Ruta del Adobe se puede hacer en un día con una excursión guiada o también de manera particular, ya sea en auto, a caballo o bicicleta. Tinogasta, además, ofrece una gran variedad de opciones para el turismo aventura: trekking, montañismo, paseos en camionetas 4×4 y cabalgatas.
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