El Gobierno se encuentra definiendo la política de ingresos para los próximos meses con el objetivo de aliviar la situación económica y mejorar las chances del Frente de Todos en las elecciones. Se espera que se anuncie un aumento del 21% trimestral para jubilados, pensionados y quienes reciben asignaciones, así como un incremento en los bonos para aquellos que cobran la mínima.

También se ha oficializado la suba del piso del impuesto a las Ganancias, lo que beneficiará a unos 250.000 empleados en relación de dependencia, y se ha establecido una serie de deducciones para aquellos que perciben este impuesto. Por otro lado, algunos sectores del sindicalismo están presionando para que se otorgue una suma fija a los empleados registrados, lo que ha sido objeto de discusión en el pasado. El Gobierno busca recuperar el consumo privado para sostener una economía que podría caer un 4% este año, según la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).