Como presidente de la Secretaría Pro Tempore del Mercosur, la Secretaría de Cultura de la Nación junto con el INAPL encabezan la organización de los talleres de capacitación en conservación de estructuras arqueológicas en tierra del camino del Qhapaq Ñan, Sistema Vial Andino.

Durante la segunda jornada, Ricardo Morales Gamarra, Director del proyecto arqueológico "Huacas del Sol y de la Luna"  -uno de los monumentos emblemáticos del Perú-, manifestó: “Estoy convencido de que una de las palancas de desarrollo más efectivo para las comunidades es este trabajo articulado del rescate del patrimonio cultural, con base en los profesionales, los técnicos y fundamentalmente las comunidades”. En relación a su aporte, agregó: “Lo que traje para la discusión y la reflexión es la anastilosis, un caso que rara vez se desarrolla, y que es una forma de recuperar evidencias arqueológicas por la excavación o desmontaje de estructuras que incluso se pueden trasladar a otros lugares como un museo”.

Técnicos de las unidades de gestión nacional, provincial, local y miembros de la comunidad local visitaron sitios arqueológicos, recorrieron los graneros prehispánicos de La Poma, y remarcaron la importancia de conservar el sitio sin dañarlo. Estas investigaciones fueron posibles gracias a la colaboración del pueblo de Japón, principal inversor en el proyecto.

Sobre los días de trabajo en la localidad de Cachi, Mónica Bolaños, Secretaria Técnica en representación de Ecuador, expresó: “Cada uno de los talleres con los expertos locales y de otros países, nos permite tener una concepción de cómo tenemos que hacer el trabajo de conservación de estos sitios y mantener su significado. Estamos trabajando en una herramienta para capacitar de manera pedagógica a los líderes comunitarios, a gestores de sitio y a los profesionales involucrados, que nos permita hablar a todos en un mismo idioma”.

En representación de Bolivia, el arqueólogo Alfredo Pacheco Solares, confirmó el compromiso de su país y el suyo como próximo Presidente de la Secretaría Pro Tempore: “Si bien nosotros tenemos estructuras en tierra diferentes a las de acá, esta capacitación nos permite llevarnos muchos conocimientos para replicar en las comunidades. De esta experiencia surge un manual de preservación y conservación en tierra y en piedra, que nos servirá para trabajar con las comunidades”.

Claudia Afanador, Secretaria Técnica Qhapaq Ñan en Colombia, agregó: “A lo largo de estos años hemos generado metodologías conjuntas, que nos permitieron avanzar y unificar criterios en términos del patrimonio y de las particularidades en lo arqueológico, en los caminos y en el trabajo con las comunidades locales. Como equipo de trabajo de Qhapaq Ñan tenemos un compromiso con el resto del mundo, porque logramos un proyecto que es un ejemplo a seguir, en términos de los procesos de investigación y gestión de los seis países involucrados”. Millón Ochoa, ingeniero geólogo, referente del Perú, compartió la importancia de estos talleres: “El Qhapaq Ñan es patrimonio mundial, las tareas de conservación e investigación tienen que tener criterios unificados y estos encuentros nos permiten construirlos”.

Como parte de las evaluaciones que siguieron a los talleres, los técnicos remarcaron la importancia del sitio arqueológico Graneros de la Poma, porque reúne características que incluyen las ciencias exactas, las ciencias sociales, el uso público, el turismo, la incorporación de las comunidades locales. El representante de Qhapaq Ñan Chile, Julieta Elizaga, expresó: “Abordamos la gestión del sitio de manera multidisciplinaria, con la integración de las comunidades y aquí logramos hacer trabajo en el campo de estudio, algo muy importante y, a la vez, difícil de conseguir”.

Como cierre de jornada, Diego Ashur Mas, manifestó: “El Qhapaq Ñan es una familia, hay que mantenerla en el tiempo, que cuidarla y eso requiere de mucho trabajo, compromiso y esfuerzo. En nombre del Secretario de Patrimonio Cultural, Marcelo Panozzo, y de Victoria Sosa, Secretaria Técnica de Argentina, quiero agradecer el esfuerzo que hacen todos por venir aquí, el trabajo que realizamos durante estos días tiene mucha relevancia en términos académicos”

EL Camino Real, comúnmente llamado Camino del Inca, se extiende desde el sur de Colombia hasta Chile, a lo largo de más de seis mil kilómetros. Su nombre en quechua es Qhapaq Ñan, columna vertebral del imperio inca. En la Argentina atraviesa siete provincias (Salta, Jujuy, Tucumán, Catamarca, La Rioja, San Juan y Mendoza), en un tramo de 118,5 km, después de pasar por Ecuador, Perú, y Bolivia. Buena parte discurre entre los 3500 y 5000 msnm, a su paso va conectando parajes, centros administrativos y religiosos, zonas agrícolas y mineras..

Un hilo de Ariadna andino, absolutamente americano. Por su alto valor arqueológico, entre otros, el qhapaq Ñan ( aquí renombrado Sistema Vial Andino), fue declarado Patrimonio Mundial en la sesión de la Unesco realizada en Doha, Qatar, el 21 de julio de 2014.