En la jornada de ayer, trascendió que una mujer, madre de dos niñas de corta edad, había denunciado a su propio padre, abuelo de las niñas, por el supuesto abuso sexual de al menos una de ellas.

Según fuentes vinculadas a la investigación el hecho salió a la luz el día lunes 28 de noviembre, cuando la madre de la víctima, de quien se reserva la identidad para resguardar a la pequeña, mientras acomodaba la ropa en la habitación de sus hijas, se percató de que una prenda íntima de la mayor de las niñas tenía una mancha de sangre.

Seguidamente, la mujer habló con su hija de 10 años y, luego insistirle en reiteradas oportunidades de que le dijera si le había pasado “algo malo”, la niña se quebró en llanto y le contó que era abusada por su abuelo.

Según trascendió, el hombre, quien aún no está detenido, habría aprovechado para someter a su nieta a sus bajas instintos cuando, con la excusa de ir a tirar la basura en el basural, sito sobre la Ruta Provincial N°46, la buscaba de la casa de su hija -la denunciante- junto a su hermanita de 7 años y las llevaba a ambas al basural.

Luego de escuchar a su hija, la mujer no lo dudó y, de inmediato, se dirigió a la comisaría local de Andalgalá y denunció a su propio padre por el abuso de su hija.

De acuerdo con lo trascendido, la denunciante habría indicado que la pequeña no pudo determinar con exactitud cuándo habrían iniciado los abusos, recordando ella que aproximadamente dos meses atrás, su padre, el ahora denunciado, había comenzado a pasar los fines de semana por su casa, donde vive junto a sus hijas y su pareja, a buscar a las niñas para que lo acompañaran a tirar la basura.

Al ser su padre la persona con la que se iban las niñas, la mujer nunca dudó y les daba permiso para fueran con este.

Tras la denuncia, el fiscal Martín Camps ordenó que en la mañana de ayer el personal a cargo de la investigación llevara a cabo una inspección ocular guiada en el lugar en el que habrían ocurrido los abusos que se investigan.

Asimismo, dispuso que a la criatura se le realizara el protocolo de abuso sexual, al igual que a su hermanita de 7 años, en razón de que, tal como lo denunció la madre de las niñas, el abuelo de estas llevaba a ambas al basural, lugar donde habría abusado sexualmente de, al menos, la mayor de sus nietas.

Hasta el mediodía de ayer, el fiscal no había tomado ninguna medida contra la libertad del abuelo denunciado por abuso.