Esta preciosa postal, a mi juicio, fue tomada hace muchos años desde nuestra casa de verano en el rodeo Villa Inés, con vista hacia el oeste  y documenta una instancia, que no por haber sido tratada con amplitud y en diferentes medios e instituciones, pierde el valor documental que pretende tener.

Situémonos en lo que se observa en la imagen a modo meramente introductorio y que sirva a los lectores para  ver las modificaciones que tuvo la villa por la imprudente mano del hombre, la inoperante acción institucional y la miopía incomprensible de tantos.

Como vemos, es una panorámica que arranca con un primer plano de las hortensias, flores emblemáticas si las hay de aquella villa veraniega. Las mismas, predominan de color rosado y celeste gracias al tratamiento del agua de riego, con un compuesto conocido como " alcaparrosa" (la parte química para otra vuelta).

Vámonos al marco de la diapositiva para luego abordar la parte que me interesa destacar.

A la izquierda un borde de la loma " la pelada del fraile"; a la derecha, la loma del arbolito. En el centro la quebrada del río de los nogales, que nos lleva a sitios tan bucólicos como "el nogal marcado" y el "bañadero de los cóndores" (que son más de tres, como usualmente se los nombra.

El río Ambato, viene transcurriendo a la izquierda de la "pelada del fraile" y al fondo, en dos cordones montañosos, primero, la loma bola, el pabellón chico y luego el pabellón grande con 3.800 m.s.n.m.

Al fondo, el crestón del tala y entre ambas cadenas se puede inferir que va transcurriendo "el río del tala".

El río Ambato cursa a la izquierda de la loma conocida como "pelada del fraile".

Toda la base de la imagen no es otra cosa que la villa de el rodeo, hace unos cuantos años, pero es notable la gran cantidad de sauces llorones y álamos que se encuentran en las márgenes del río Ambato, casi desde el puente de la tragedia, hasta el puente caminero sobre la ruta principal y "calle de las maravillas".

Muchos de ellos (sauces y álamos), fueron plantados por mi padre en el año 1931, cuando comenzó la construcción de "villa Inés", y es obvio que fue una certera protección de las fincas que se encontraban al este del muy caudaloso curso de agua.

Mientras iba frecuentemente por la Villa ( lugar de mis amores o como se dice ahora, mi lugar en el mundo), ha sido constante mi discusión con buena cantidad de intendentes que por una u otra razón, pretendían ( y lo lograron),sacar los sauces, no sólo de éste lugar sino también, como ocurrió en  el acceso al balneario.

No hubo modo de convencerlos que ésta actitud, traería consecuencias serias, tal como mostré en varias notas periodísticas, puesto que el río o los ríos, tomarían sus verdaderos cauces saliendo de aquellos propuestos por la ignorancia supina y tomando por sitios que seguramente causarían graves consecuencias.

Ésta era la vegetación de la villa, bueno estaría tomar nuevamente fotografías desde el mismo punto para observar las diferencias, a la vez de comparar con aquellas que tomó mi padre y se notaba cómo el cauce del Río Ambato, prácticamente tomaba por las partes que luego el hombre, soberbio por naturaleza, pobló de edificaciones.