Se puede entender que, el ser una autoridad del Partido Justicialista, la obliga a ser congruente con los gobiernos de su signo.

Se puede entender que, ella lleva la marca en el orillo de su origen kirchnerista, como miembro de la familia Mercado.

Lo que no se puede, ni debe de entender es que considere "pavadas", los reclamos al gobierno nacional. Para comprender este vocablo, sería bueno que conceptualice el mismo.

Para la Médica, ex Vice Gobernadora, ex Senadora de la Nación, ex Gobernadora y actual Diputada de la Nación, son hechos y/o datos vanales, triviales, baladíes - que podrían ser sinónimos de "pavadas" - la pobreza estructural extrema, crítica y la situación de los nuevos pobres cuyos números son alarmantes.

¿Qué sentirá la Doctora, sí a cada número de la pobreza pone un rostro humano?

Por el voto popular, se le ha conferido tan altas y dignas responsabilidades durante muchos años, aunque en reiteradas oportunidades renunció a algunas de esas responsabilidades, en busca de otros honrosos sitiales y, aún con todos esos logros excepcionales, se atreve a menoscabar la inteligencia y los sentimientos no sólo del Pueblo de Catamarca sino de toda la Argentina.

Bueno sería que la Doctora Lucía Corpacci, sea consecuente con su segundo nombre, Benigna y haga un alto en el camino para reflexionar y pida disculpas.

Un humilde pedido de perdón a sus exabruptos, le daría la grandeza que se requiere para ocupar tan altos cargos que el Pueblo de Catamarca le ha confiado.