Mientras preparo la próxima nota sobre el ilustre franciscano, vaya este testimonio documental de una de las paredes exteriores de la catedral donde se encuentran decenas de placas de homenajes, dejando claro que en la parte interior de la pared se encuentra totalmente tapizada de similares homenajes, pero es imposible su documentación por permanecer cerrada.

De ser factible agregaré otros homenajes similares esparcidos por infinitos lugares, no sólo de argentina sino de América, Europa y el cercano oriente. Por testimonios escritos, sabemos que los hay en Tierra Santa, Roma, Alejandría (donde dio varios sermones y alguna referencia hay, sobre un colegio con su nombre en el propio Irán (a confirmar).

Hemos invitado a quienes así lo deseen, a expresar sus conocimientos o documentos en éste sitio lo que se agradece de concretarse.

El material que tenemos en estudio para ser dado a conocer, es realmente sorprendente y, por la intermediación del Prof. Rodolfo Schweitzer, pude acceder a una de las bibliotecas más grandes de Estados Unidos, donde se encuentran más de un centenar de títulos y escritos de y sobre Fray Mamerto Esquiú, incluso para mi sorpresa , el de Alberto Ortíz, que utilizo como fuente de mis escritos.. Realmente sorprende éste contacto y estoy tratando de aprender a utilizarlo ya que una vez logrado, seguramente se ampliará notablemente las consulta de fuentes seguramente hasta ahora ignoradas por mí.

Cada día que pasa en la lectura de lo dicho y hecho por el " frailecito catamarqueño" ( así se refiere un altísimo político de la época), se van abriendo nuevos horizontes, encontrando inexplicable cómo recién ahora parece concretarse la elevación a Santo; probablemente hubiese también merecido un Nóbel de Literatura, de la Paz o uno que premie por su inmensa sabiduría.

Hay demoras que no las comprendo y seguramente se trata de mi desconocimiento, pero reitero que no le encuentro explicación alguna.

Perdónalos Mamerto, parece que "algunos no saben lo que hacen"