Todas las regiones, provincias y ciudades conviven con costumbres que las vuelven únicas y especialmente atractivas. Las costumbres de una sociedad, por ejemplo, nos permiten conocer los orígenes de sus habitantes y comprender muchos hábitos o conductas sociales populares. Catamarca, no es la excepción. En este sentido, si nos vamos al calendario anual, encontramos que sus fiestas y festivales homenajean a la naturaleza, al valor intrínseco e indiscutido de la tierra, y que muchas de ellas destacan la figura del artesano y de la gastronomía catamarqueña en general.

Catamarca, además, es una de las provincias argentinas con más historia en América del Sur. La ruta del Adobe, por ejemplo, es la postal que reúne cerca de 300 años de historia y, si bien hoy también es un atractivo turístico, se trata de un camino que conserva y explica la esencia de los catamarqueños hasta la fecha. La ruta del Adobe es un cordón de 55 kilómetros de viviendas y otras construcciones con arcilla y pasto que cuentan, detrás de su infraestructura, cómo fue la vida de los indígenas que habitaron la provincia hace muchos años atrás.

Hombres y mujeres de Catamarca: ¿Cómo somos?

Es difícil generalizar, y no pretendemos definir a nadie, mucho menos las personas, que somos distintas aunque convivamos en una misma región, pero es cierto que existen ciertos rasgos que responden a las costumbres de nuestros antepasados, a hechos históricos que sellaron formas de pensar o de vivir, a actitudes que con pequeñas sutilezas nos diferencian de otras comunidades.

Muchos coinciden que los y las catamarqueñas somos observadores, prudentes y leales. Que nos gusta dormir siesta, que estamos orgullosos de nuestros paisajes, de la Puna que nos acompaña a diario y de nuestras empanadas. Tenemos una sensibilidad particular por lo que nos brinda la tierra y, en su homenaje, cada tanto lo agradecemos celebrando esa dicha. Tenemos, de hecho, varias fiestas antiguas y otras no tanto, que acompañamos con folklore norteño.

Conservadores, amables, religiosos en su mayoría y leales, podríamos afirmar que respetamos a la naturaleza, la veneramos e intentamos cuidarla lo mejor que podemos.

Fiestas y festivales que nos caracterizan

En Catamarca tienen lugar diferentes fiestas populares, la mayoría de ellas se encuentran relacionadas con las costumbres, religiones y una forma de rendirle homenaje a los diferentes productos que brinda la tierra.

Algunos de los Festivales y fiestas en la Provincia de Catamarca son:

• Fiesta Agro Ganadera y Artesanal de la Puna, realizada en Antofagasta de la Sierra.

• Fiesta de la Betea en el Bolson de Pipanaco (Saujil Poman).

• Fiesta del Niquixao en el Rodeo, Ambato.

• Fiesta de la Empanada en Capital y Valle Viejo.

• Fiesta del Locro, en la Capital.

En las tradiciones que valoran lo sustentable y se adaptan a los nuevos escenarios que exige la Pandemia, un evento que revolucionó a Catamarca fue y es la Fiesta de “El Poncho”, de gran adhesión popular. La fiesta cruza el rescate de técnicas de tejido ancestrales con la música y la comida folklóricas, lo que la convierte en un evento único en su tipo.

En 2020 fue virtual y su adhesión, a pesar de su condición remota, superó muchas expectativas: reunió a miles de personas bajo el hash o etiqueta #DesafioPoncho. Se trata de una trama que, en los últimos años, aportó beneficios colaterales: ayudó a recuperar una especie en extinción como la vicuña silvestre que aporta fibra para el tejido artesanal.