El miércoles por la noche, la ciudad de Morteros, provincia de Córdoba, fue escenario de una situación insólita y atípica en tiempos de pandemia. La problemática se dio debido a que, en medio de una preocupación por una posible segunda ola de coronavirus, se disputó el encuentro entre 9 de Julio y Tiro Federal con más simpatizantes de los que habían aprobado las autoridades municipales.

La Municipalidad de Morteros había habilitado hasta 600 personas para que asistan a ver el clásico de la ciudad, disputado en el estadio Bautista Monetti. A pesar de esto, la presencia del público se desbordó y asistieron más de 800 hinchas, sumado a los jugadores de divisiones inferiores.

En una entrevista realizada por el Diario Mundo Deportivo de Córdoba, un allegado a uno de los clubes contó detalles de la escandalosa situación: "Entró más gente de la permitida. La cancha estaba llena. No había muchos barbijos. De hecho, parecía un clásico más como los de antes. Se vendieron 800 entradas y también estaban todos los jugadores de las divisiones formativas".

En consecuencia, la Municipalidad de Morteros realizó un acta correspondiente al incumplimiento de los protocolos sanitarios en medio de la pandemia de coronavirus. Se esperan duras sanciones o multas para los responsables del acontecimiento.