"La Señora Presidente del cuerpo se enamoró del enorme poder que le dan las sesiones remotas", sostienen Luis Naidenoff (UCR-Formosa) y Humberto Schiavoni (Pro-Misiones) en el recurso presentado ante el fuero contencioso administrativo.

La presentación generó el rechazo del bloque oficialista. "La bancada macrista amenaza con paralizar el funcionamiento del Senado, recurriendo nuevamente a los juzgados a buscar lo que no lograron conseguir en las urnas", denunció el Frente de Todos en un comunicado.

El amparo presentado por los senadores de Juntos por el Cambio

El recurso opositor sostiene la invalidez del decreto 14720, última prórroga del protocolo que firmó la vicepresidenta, porque no alcanzó la mayoría agravada de dos tercios que se necesita para reformar el Reglamento del cuerpo.

El extenso escrito de 55 páginas, patrocinado por el abogado radical Antonio "Tuta" Hernández, no sólo acusa a Cristina Kirchner de abusar del sistema de sesiones remotas, sino que también cuestiona su desempeño como presidenta de la Cámara alta.

"La señora Presidente no ha hecho cumplir el Reglamento de la Cámara. Así, no ha cumplido ella tampoco con sus deberes como Presidente del cuerpo", afirma la oposición en su impugnación.

Irregularidades

Tras explicar por qué a su criterio cada protocolo de sesiones virtuales implica una modificación del Reglamento del Senado, y por lo tanto requiere la aprobación de los dos tercios del cuerpo, los senadores de Juntos por el Cambio enumeran una serie de irregularidades a las que ha dado lugar el uso del sistema de sesiones a distancia.

"El sistema informático que se ha adoptado, concentra su administración en áreas operativas que dependen exclusivamente de la Presidencia del Senado, sin ningún tipo de auditoría informática por parte de los bloques opositores", destaca el escrito.

Según la denuncia, esta situación complica el control de los presentes en las sesiones, porque hace "prácticamente imposible, sin tener acceso al sistema, verificar la real asistencia de todos los Senadores que aparecen registrados con la evidente implicancia que eso tiene en el quórum y en las votaciones".

Además, destacan que "el acceso al sistema ha fallado en varias oportunidades", lo que llevó a que en algunos casos los senadores hayan tenido que "acceder por intermedio de un link de acceso directo que le fuera remitido a su casilla de mail, sin seguir ningún protocolo de seguridad en cuanto a la verificación de su identidad".

En otro pasaje de la denuncia, Juntos por el Cambio señalan la arbitrariedad de que en la transmisión de las sesiones "sólo sale lo que el operador del sistema decide".

"En este sentido, mientras los senadores hablan y se escuchan entre sí, pidiendo la palabra o solicitando interrupciones o efectuar mociones, hay un funcionario del Senado, que depende de Presidencia, que dispone a quién se escucha y a quién no, a quién se le da imagen y sonido y a quién no. Ello tiene especial implicancia en la versión taquigráfica de la sesión, que sólo reflejará lo que a criterio de ese funcionario (y de la presidencia) es relevante", afirma el escrito.

Por último, el amparo también destaca que "se ha modificado físicamente el recinto de la Cámara, habiéndose montado una estructura en el medio de él, anulando la mayoría de las bancas, imposibilitando de hecho la asistencia presencial en el recinto de los senadores que así lo consideren", en alusión al sistema de pantallas instalado para tener imagen de cada uno de los senadores que se conecten a las sesiones virtuales.

"Resulta por demás evidente que estas circunstancias menguan ostensiblemente las prerrogativas de los senadores, y afectan la naturaleza más elemental de los debates parlamentarios", concluyen los senadores de la oposición, quienes sostienes que "la prórroga inválida de las sesiones virtuales generará que se sigan cometiendo estos atropellos".

Gustavo Ybarra