El peor escenario de la infidelidad hoy puede trasladarse a las redes y viralizarse en cuestión de horas. Fue lo que sucedió ayer en Tandil. Ni bien se conocieron las primeras fotos, todo fue cuestión de minutos para que toda la ciudad, e incluso las ciudades vecinas compartieran el tremendo escándalo que provocó el hecho. Incluso con acusaciones cruzadas y poniendo en duda todo, al ser desmentida la viralización de las fotos.

Cuestiones que no se sabe muy bien cómo y cuándo empiezan y menos como y cuando terminan. Incluso muchas de estas situaciones han terminado de la peor manera, por ejemplo con matrimonios divorciados y familias destrozadas.

Siendo prudentes sólo vamos a escribir la hipotesis de los hechos que suscitaron la viralización de las fotos, videos y post, tanto en Facebook como en Whatsapp y hasta en YouTube.  Los nombres supuestos o no, que formaron parte del culebrón fueron Ana y Miguel, supuesto matrimonio y Daniela, la tercera en discordia.

Parece ser que Ana se sintió tocada en su honor de mujer correspondida, al descubrir o sospechar que su marido, Miguel, supuestamente la engañaba con Daniela, los nombrados en último término, colegas abogados del foro local. Al enterarse de quién era la amante, averiguó su dirección y nadie sabe sin contrató a algún tercero o ella misma, y se dirigió a la casa de la amante donde realizó las pintadas, que horas más tarde llegaron a muchas ciudades bonaerenses e incluso fueron tema central del conocido programa de TV "Buenos Días América" que conduce Antonio Laje.

El escrache culminó con un chalet en pleno centro todo pintarrajeado de rojo con epítetos de fuerte tono despectivo y vengativo, que no vale la pena reproducir por cuanto las fotografías son más que elocuentes. la casa en cuestión se encuentra ubicada en Maipú, entre Alsina y Roca.

Al poco tiempo, Miguel el supuesto infiel salió a desmentir la historia que lo involucraba y que seguramente era otro Miguel y que él creía que le habían usado la foto. Su desmentida, por inverosímil, también se viralizó y mucho más aún, porque generó memes de todo tipo, ya que su post fue como pretender apagar el fuego del incendio con nafta de avión. Nadie le creyó y no se puede saber si Ana aceptó el correspondiente descargo o tenía pruebas contundentes.

Los memes fueron lapidarios y ni bien desmintió la supuesta infidelidad, aparecieron los funebreros ...

Las repercusiones familiares no se hicieron esperar y los hijos salieron a pedir clemencia, aunque el daño ya estaba consumado. Horas más tarde apareció un hombre para arreglar las pintadas. Evidentemente hubo alguien que lo hizo y por alguna razón, ya que a nadie se le ocurre un escrache como diversión, al fin y al cabo es un delito de daño y alguien posteriormente mandó a borrarlo, antes que todo terminara en la justicia penal.

Sería importante que los padres o madres infelices, recurrieran al divorcio antes que tomar venganza por mano propia, que como puede observarse, siempre termina muy mal o afectando a inocentes, en este caso los hijos que sufren las desavenencias de sus padres de la peor manera.