Giudicelli, mostró un notable optimismo aunque aclaró que se permitirá el ingreso de muchos menos espectadores debido a la emergencia sanitaria: "Debo informar que se logró evitar lo peor, la cancelación de Roland Garros. Debimos postergar el torneo por algunos meses, pero aquí estamos y es un alivio. Se jugará con aficionados y eso es lo más importante", publicó el dirigente nacido en la ciudad de Bastia, en su cuenta de twitter.

https://twitter.com/FFTennis/status/1264473711236706304

El abierto francés, un torneo de tenis que conforma el Grand Slam, que debía jugarse este año entre el 24 de mayo y el 7 de junio, con el español Rafael Nadal como máxima atracción con su colección de 12 trofeos, fue pospuesto para la última semana de septiembre y la primera de octubre, así se evitó cancelarlo como sucedió con Wimbledon, que no se jugará y pasó directamente para 2012 a raíz de la crisis sanitaria que generó el coronavirus en gran parte de Europa.

"Creo que hemos lograd salvar el mayor torneo del planeta sobre polvo de ladrillo y nos encaminamos a jugarlo con una cantidad de espectadores reducida, pero con público", añadió el dirigente francés.

A su vez, la Federación Francesa de Tenis (FFT) lanzará un plan de ayuda de 35 millones de euros de manera efectiva el 3 de junio, y hasta el 21 de agosto, con una plataforma dedicada que distribuye el fondo entre los clubs, torneos, jugadores y oficiales, según comunico el organismo en el día de ayer.

En caso de que se cancele el torneo, que le da al FFT alrededor de 70 millones de euros en ganancias netas cada año, el plan de ayuda se mantendría: “Lo que le pase con Roland Garros no tendrá relación con el plan de ayuda”, aseguró Bernard Giudicelli.