A pesar que la Cámara Baja sesionó y ratificó a libro cerrado ocho decretos dictados por el poder Ejecutivo, hechos que ocurrieron el día miércoles próximo pasado en la tercera sesión ordinaria, bajo la presidencia de Cecilia Guerrero, los diputados ratificaron 11 decretos acuerdos enviados por el Ejecutivo para su análisis.

Entre estos instrumentos se encuentran la adhesión de la provincia al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) del Gobierno nacional por la pandemia del coronavirus y la sanción de multa a toda persona que incumpla con los dispuesto en el aislamiento social preventivo y obligatorio.

Algunos dirigentes de la oposición siguen cuestionando el procedimiento por ser manifiestamente contrarios a derecho. En efecto, los dirigentes, en cuanto diputados, que en principio no convalidaron con su voto el despliegue normativo del gobernador, se encuentran en pleno proceso de preparación de las acciones correspondientes ante la Corte de Justicia, que en éstas cuestiones tiene competencia originaria.

Se aduce que el Gobernador carece de facultades para dictar los decretos por cuanto los de necesidad y urgencia no están previstos en el ordenamiento constitucional, artículo 184 y cualquier disposición en contrario es violatorio de la citada norma, por más que la Cámara Baja la ratifique, nadie puede confirmar un acto que desde el origen está tachado de nulidad por carecer unos de los requisitos esenciales para su existencia.

Además se les suma la disposiciones cuestionadas, las que comprenden la creación de la Tesorería General de la Provincia sea el organismo de percepción y distribución de regalías mineras, las modificaciones a las leyes de creación del Instituto Provincial de la Vivienda y de la Dirección Provincial de Vialidad y de creación de la Caja de Prestaciones Sociales de Catamarca.

Aunque por estas horas se desconoce el grado y tenor jurídico, cualquier medida cautelar de no innovar con respecto a los decretos provocaría en forma inmediata la suspensión de los efectos jurídicos de los actos administrativos dictados, hasta que el Tribunal Superior de Justicia se expida sobre la cuestión de fondo.

El resultado de la votación varió de acuerdo al instrumento que se trataba. Para el caso, ocho de los decretos fueron aprobados por mayoría dejando tres ratificados por unanimidad del cuerpo. Unanimidad de los presente no significa la totalidad del Cuerpo. De todos modos El Pucará intentó infructuosamente acceder a la información del voto nominal de cada decreto y no obtuvo respuestas de distintos legisladores y referentes políticos de la oposición.

En consecuencia, se infiere que el oficialismo votó a favor por ocho proyectos, ganando por mayorías y el rechazo de la oposición. Tres salieron por votos unánimes, pero de los diputados presentes. Había diputados ausentes. Del mismo modo que quien esté intentando ejercer los derechos ante la Corte de Justicia, con seguridad no ha ejercido el voto a efectos de evitar la aplicación de la teoría jurídica de los actos propios.