Luego fue su viaje al sur con su familia, en simultánea con la decisión del presidente de decretar la cuarentena, con evidencias importantes de que manejaba información privilegiada debido a su amistad con Alberto Fernández. En ese momento, el mismo presidente pedía que nadie se moviera de su casa.

Peores fueron los justificativos que utilizó para defenderse de las críticas que generaron un repudio generalizado, varias personalidades del ambiente artístico fueron muy duras con el conductor.

Ahora se conoció un nuevo hecho que provocó aún más indignación, Tinelli contrató un avión para que supuestamente traslade medicamentos, ya que él y su hija necesitan para un tratamiento y no los consiguieron en Esquel.

Entonces se realizó este vuelo sanitario, es la única manera de justificar un vuelo en plena cuarentena, pero lo llamativo es que no se realizaron todos los trámites correspondientes. Esta irregularidad fue percibida por la autoridad de la PSA (Policía de Seguridad Aeroportuaria) en el aeropuerto de Esquel y realizó la denuncia correspondiente. Al respecto ya se sabe que el Juez Federal de Esquel tramita un sumario de investigación respecto al permiso, el traslado aéreo, el contenido de la maleta y otros detalles.

Como frutilla del postre, Tinelli salió con los tapones de punta contra el Grupo Clarín. Cansado de una sumatoria de artículos críticos a su figura publicados en el diario Clarín, el conductor y empresario televisivo denunció que es víctima de un “hostigamiento” y de un “ataque sistemático” de parte del multimedios que lo contrata desde hace años para la realización de Showmatch.

"Veo un hostigamiento sistemático del diario Clarín que me sorprende, porque es el diario donde trabajo a través de Canal 13. Me han tratado dos veces en dos editoriales de pelotudo, con una falta de respeto absoluta", disparó.

“No llego a entender el por qué de tanto hostigamiento. En 2006, cuando fue el Mundial de Alemania, me pasó lo mismo. No lo puedo creer y me parece muy injusto.

No está bueno seguir mintiéndole a la gente de esa manera. ¿Clarín miente? Sí, y esta vez (el título) lo pongo yo”, afirmó en declaraciones a radio La Red. “Si yo me pusiera a hablar de las denuncias que tiene el Grupo Clarín, no termino el día", subrayó, furioso.

Más allá de cualquier opinión que tenga el destinatario de esta nota, es preciso señalar cuestiones básicas que el conductor televisivo no está acostumbrado a acatar. Todos somos iguales ante la ley, sin importar el rango o categoría social a la que cada una pertenezca. Ni Pérez, ni García, ni Marcelo Tinelli tienen preferencias para moverse libremente por el país en el medio de una la Pandemia Mundial y descalabro económico.

Nadie tiene coronita ni preferencias ni privilegios. Al trasladarse a Esquel rompió su contrato social con el orden constituido. Ahora, no corresponde que desparrame culpas sino que asuma su propia responsabilidad, porque el  coronavirus se representa una corona y la realidad es que acá nadie tiene "coronita" para hacer lo que se le cante.

Estamos seguros que Tinelli no vuelve, no habrá baile y Clarin no miente.